Redacción de El País. Imagen: Cortesía Prisa

El País superó el pasado viernes los 214.000 suscriptores exclusivos digitales, lo que, unido a los 33.000 de la edición impresa, que tienen también acceso a la edición digital, y cerca de 7.000 de la versión en PDF del papel, suman ya más de 250.000 suscriptores.

El País se ha fijado como objetivo estratégico llegar a los 450.000 suscriptores en 2025.

Carlos Núñez, presidente ejecutivo de Prisa Media y presidente y consejero delegado de El País, destaca este crecimiento “muy por encima de la media en España e incluso de grandes periódicos internacionales”, y asegura que el objetivo de superar “como mínimo” los 450.000 suscriptores en 2025 se conseguirá “con el aval de los 400 periodistas que integran la redacción y unas normas claras que defienden el rigor y la transparencia”, pero sobre todo con tres claves:

  1. Producto editorial de calidad. “Si no tiene calidad, nadie va a pagar”, recuerda Núñez.
  2. Industrialización del proceso en la gestión de suscriptores.
  3. Buena experiencia de usuario sin saturación publicitaria.

Según Borja Echevarria, director adjunto del periódico, “estamos ante un hito” en la transformación y sostenibilidad del periódico, “un logro conseguido en solo dos años y medio”. 

El estallido de la guerra en Ucrania el 24 de febrero de este año y la cobertura sobre el terreno de la decena de enviados especiales del periódico, unido al cambio de modelo de pago unas semanas antes [El País pasó de un modelo premium a una freemium], aceleró el incremento sostenido de suscriptores, apunta. 

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El ganador se lo lleva (casi) todo

Echevarria recuerda las palabras de Louis Dreyfus, consejero delegado de Le Monde, en las que aseguraba que el de la prensa “es un sector en el que habitualmente el ganador, o como mucho los dos primeros, se llevan la mayor parte del negocio”. 

El director adjunto de El País recuerda que, en España, las cabeceras tradicionales tardaron bastante en implementar los modelos de suscripción, a diferencia de otros periódicos tradicionales. El País lanzó su muro de pago en mayo de 2020, El Mundo seis meses antes, y antes aún muchos periódicos de Vocento.

La Vanguardia lo hizo en octubre de 2020 y eldiario.es, medio nativo digital, ya nació con un sistema de socios que pagaban aunque la web fuera en abierto.

Echevarría: “Ningún periódico español, salvo el País, supera los 100.00 suscriptores digitales”

“Los datos de la industria -sostiene Echevarría- muestran que ningún periódico salvo El País supera los 100.000 suscriptores digitales. Casi todos están aún lejos de esa cifra y, según explican líderes de distintos medios, el ritmo se ha estancado en los últimos meses”.

Echevarría, que ha consultado y entrevistado a líderes editoriales sobre suscripciones para documentar el artículo sobre el crecimiento de suscripciones en El País, apunta que más allá de los números, existe un denominador común en las conversaciones con todos los entrevistados: “No hay otro camino que invertir en contenido de calidad, que invertir en periodismo, que invertir en periodistas. Por supuesto, hace falta mucho más para lograr el éxito, coinciden, pero algunas viejas recetas de internet difícilmente van a sostener a grandes medios independientes, y tampoco lo hará la publicidad como fuente principal de ingresos”.

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Pepa Bueno: “Estamos construyendo una comunidad a la que le preocupan las mismas cosas que a nosotros”

Por su parte, la directora de El País, Pepa Bueno, describe así la situación: “Haber alcanzado ese hito significa que es posible. Estamos construyendo una comunidad a la que le preocupan las mismas cosas que a nosotros. Los lectores nos hacen reclamaciones en las que estamos trabajando. Por ejemplo, el desafío de los jóvenes, o llegar a más lectores en América. También quieren ser partícipes, y aprendemos con ellos, porque durante muchos años nuestra relación ha sido unidireccional”.

A la directora de El País, con todo, le preocupa la fuerte polarización actual: “La falta de consenso sobre la realidad es muy peligrosa, y ahí tenemos que emplearnos a fondo. El periodismo es fundamental para la democracia. Yo creo en las redacciones que tienen una envergadura que permita hacer un trabajo lento, de periodismo exigente. Y para eso necesitamos seguir creciendo en suscriptores”.

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