Aunque ha sido 2019, y avanzado el semestre además, el año en que más medios españoles, sobre todo regionales, (La Voz de Galicia, El Norte de Castilla, Sur, la modificación del proyecto de pago por contenidos en Prensa Ibérica, como LNE+, y otros), están creando muros de pago, la última referencia al respecto no es demasiado halagüeña. Según los datos aportados por el Digital News Report para España, que se publicó ayer, el porcentaje de encuestados que ha pagado por noticias digitales permanece estancado en torno al 10% desde 2015, ya sea en forma de pago por unidad, suscripción o donación.
En todo caso, además de que es 2019 cuando se están cerrando más contenidos por parte de los medios, y habrá que ver en perspectiva por tanto la evolución de los datos en el bienio 2019-2020, es cierto también que la lenta evolución o estancamiento por parte de los lectores a pagar por las noticias no es un hecho aislado de España.
El estancamiento del pago por noticias digitales se ha dado en la mayoría de los 38 países analizados. Apenas ha crecido en países como Noruega (34%) o Suecia (27%), en incluso en EEUU, donde se produjo un importante incremento en 2018, se ha estabilizado de nuevo en torno al 15%. En los nueve países donde se monitoriza el pago desde hace 2013, apenas ha habido cambios en la proporción de internautas dispuestos a pagar. Según el informe, «la mayoría de los ciudadanos no está preparado para el pago y todos los indicios muestran que tampoco lo están para hacerlo en el futuro, al menos por el tipo de noticias a los que actualmente pueden acceder gratuitamente».
«España no escapa a esta tendencia -agrega el Digital News Report-. Es uno de los países con una dieta informativa abundante (la mitad de los encuestados consulta 7 marcas o más a la semana para estar informado) y gratuita. Los que pagan son unos pocos (10%) y la mayoría sólo paga por un único medio (51%), de tal forma que el favorito se lo lleva prácticamente todo. Las fórmulas de suscripción a un medio digital (34%), suscripción conjunta de ediciones digital e impresa (38%) o donación (18%) se imponen frente al pago por unidad o ejemplar (19%)».
Para los autores del estudio, «resulta preocupante contrastar estas bajas cifras de pago por las noticias digitales en un momento en el que la oferta de servicios de pago se está incrementando, como lo demuestra el hecho de que más de la mitad de los encuestados (51%) declara haberse encontrado semanalmente con ofrecimientos de suscripción y/o barreras de pago al hacer click en un enlace de una noticia digital. Este porcentaje se incrementa en el caso de aquellos usuarios con mayor hábitos de consumo de información: el 58% ha recibido al menos una invitación semanal a suscribirse a un medio, y el 39% lo recibe a diario».
Perfil del internauta que paga
El perfil del internauta español que paga por noticias se trataría de un hombre (13% paga, frente al 7% de las mujeres), menor de 35 años (18% paga), con alto nivel educativo (13%) y económico (14%), que muestra un gran interés por la actualidad (18%), y cuya fuente principal de noticias es digital (15%). Por el contrario, tienen menos probabilidad de pagar por noticias digitales las mujeres (7%) de más de 35 años (8%), de nivel económico bajo (9%) y grado educativo medio – bajo (8%), con escaso interés por los asuntos públicos (8%) y cuyo medio favorito para estar informado son los tradicionales (9%).
A la vez que los editores de información tratan de rentabilizar sus noticias, han surgido en los últimos años otros competidores como Netflix, Amazon Prime, Spotify, Apple Music o PlayStation Plus que están ingresando millones de dólares por las suscripciones a sus productos. ¿El aumento de la demanda de estos servicios supone un descenso del pago por la información digital?, se preguntan los autores del informe.
Por un lado, «el incremento del pago por los servicios digitales de entretenimiento colisiona con la repetida “cultura de lo gratuito” que justificaba la reticencia del público a pagar por noticias». Por otro lado, «la explosión de ofertas digitales de pago podría estar generando cierta “fatiga” en el público, cansado de que se le pida suscribirse a todo tipo de contenido digital».
Por ello, este año se preguntó a los encuestados qué tipo de suscripción elegirían durante el próximo año. «No es una sorpresa comprobar que la mayoría optaría por gastar en productos o servicios de entretenimiento como vídeo bajo demanda (30%) o música en streaming (9%). Apenas un 7% pagaría por noticias digitales, idéntico porcentaje que los canales deportivos y muy similar al de almacenamiento de datos en la nube como Dropbox (6%) o vídeojuegos en línea como PlayStation Plus (5%)».
En el caso de las generaciones menores de 35 años, apenas un 5% pagaría por información digital, frente al 43% que se suscribiría a vídeo bajo demanda, música en streaming (11%) o juegos en línea (10%). Tampoco sorprende que conforme aumenta la edad, disminuya el interés por el vídeo bajo demanda. En términos globales, a mayor edad se produce una mayor resistencia al pago: sólo un 16% de las cohortes más jóvenes no pagaría por nada frente al 41% de los mayores de 35 años o el 58% de los mayores de 65 años.