Los grupos de comunicación españoles siguen sin ser muy conscientes de los riesgos que afectan a su credibilidad e independencia editorial, según el informe Primera plana, elaborado por la Fundación Compromiso y Transparencia, y que se ha presentado en la Fundación Rafael del Pino, en compañía de los periodistas Ana Pastor y Giles Tremlett y los profesores de universidad Ángel Arrese y Carmen Fuente.
Ninguno de los veinte medios analizados ha obtenido la calificación de transparente, quedándose a bastante distancia de la puntuación mínima requerida (24 puntos) para obtener dicha calificación. Solo cuatro de ellos alcanza la categoría de translúcida: Atresmedia (18 puntos de un total de 38), Prisa (17), Mediaset (13) y Vocento (12), todos ellos grupos cotizados. En el apartado de no cotizados, todos son calificados de opacos, aunque dentro de esa calificación obtienen cinco puntos eldiario.es, cuatro el grupo Henneo, dos Imagina Media y Zeta, y con uno Godó y Joly. Los menos transparentes, con cero puntos, de entre los no cotizados son El Español, Cope, Planeta, Prensa Ibérica, Grupo Segre, La Voz de Galicia, El Punt-Avuí, Intereconomía, Diari de Tarragona y El Confidencial.
El ranking se ha elaborado tras estudiar las prácticas que llevan a cabo tanto las empresas de medios cotizadas como las no cotizadas para proteger la credibilidad e independencia en cinco secciones –propiedad, gobierno, ingresos económicos, creación y divulgación de contenidos y cumplimiento normativo. En total se han analizado los 21 principales grupos de comunicación privados.
«Los medios de comunicación son uno de los sectores más opacos»
El informe señala que las empresas de comunicación, «cuya influencia a la hora de configurar los valores de la sociedad resulta incuestionable, constituyen uno de los sectores más opacos».
La gravedad de este hecho, según el estudio, «no se puede suavizar en unos momentos en los que la credibilidad de las instituciones y personas está siendo sometida a un constante asedio por el auge de las fake news. Recuperar y promover la confianza de la sociedad en sus instituciones resulta crítico para fortalecer los fundamentos morales en los que se asientan las democracias. Esa tarea requiere, entre otras medidas, que las empresas periodísticas comiencen a adoptar y hacer públicas un conjunto de prácticas y políticas orientadas a defender y fortalecer su credibilidad e independencia editorial»
Más información: Primera plana. Informe de transparencia y buen gobierno para garantizar la independencia y credibilidad editorial 2018