Una mayoría significativa de la ciudadanía considera que el ejercicio del periodismo en España se enfrenta hoy a más obstáculos que hace una década. Así lo revela el último estudio del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) sobre calidad democrática, donde un 56% de los encuestados sostiene que los periodistas cuentan con menos libertad e independencia para desempeñar su labor informativa en comparación con hace diez años.
Los datos reflejan una preocupación extendida por la situación del periodismo en el país. Frente al 56% que aprecia un deterioro, apenas un 24,1% considera que los profesionales de la información gozan de mayor margen de maniobra que en el pasado, mientras que un 16,8% cree que la situación se mantiene sin cambios. La percepción de una prensa condicionada se amplía con otras cifras del mismo estudio: un 88,7% de los consultados afirma que los medios favorecen determinadas opciones políticas o intereses económicos, y un 74,7% considera que están excesivamente concentrados en manos de pocos grupos empresariales.
Además, la encuesta revela una opinión dividida sobre la pluralidad informativa. El 55,5% opina que los medios no ofrecen acceso suficiente a diferentes puntos de vista, frente al 43,1% que considera lo contrario. La desconfianza alcanza su punto más alto con la proliferación de noticias falsas: un 80,7% cree que los medios reproducen bulos y desinformación de manera habitual.
Este panorama coincide con otras valoraciones del informe del CIS, que apuntan a un malestar generalizado sobre el funcionamiento de las instituciones democráticas. En lo que respecta a la libertad de expresión y el acceso a información veraz, los datos sitúan el foco en un problema estructural que trasciende el ámbito mediático y que plantea interrogantes sobre la salud de la democracia en España.