Uno de los grandes desafíos que afrontan hoy en día los medios digitales convencionales es conectar con la audiencia joven. En un contexto donde las redes sociales son la fuente primaria de información para las nuevas generaciones, muchos periódicos tradicionales y digitales luchan por captar la atención de un público cada vez más disperso y saturado de contenidos rápidos y superficiales.
Este fenómeno ha generado una desconexión entre los medios de comunicación convencionales y los jóvenes, quienes buscan formatos más interactivos, visuales y que hablen su lenguaje.
En ese contexto, el podcast Ça bouge dans les médias, producido por la filial de la Agencia France-Presse (AFP) Mediaconnect, ha puesto el foco en tres medios que, a diferencia de otros, están logrando una conexión significativa con la juventud en torno a temas serios y relevantes.
Uno de los medios destacados fue Le Crayon, junto con Entre les lignes y Backseat, por su capacidad para atraer a un público joven y fomentar el debate profundo y crítico sobre los problemas actuales.
Le Crayon, fundado por Wallerand Moullé-Berteaux, un joven emprendedor de 26 años, ha emergido como uno de los medios de referencia en Francia, especialmente entre aquellos nacidos en la era de las redes sociales.
Con una comunidad de más de 700.000 seguidores en diversas plataformas digitales, el medio ha conseguido lo que otros no: utilizar el lenguaje y los códigos de la generación digital para crear un espacio donde se discuten, se cuestionan y se analizan los problemas que afectan a la sociedad contemporánea.
El enfoque de Le Crayon es claro: reunir a actores de distintos campos —intelectuales, políticos, influencers, artistas y emprendedores— para debatir y confrontar ideas de manera constructiva.
Según su fundador, su misión es “reunir a la sociedad francesa” a través del diálogo, la reflexión crítica y el intercambio de perspectivas. Y lo ha conseguido gracias a formatos que combinan profundidad con un estilo visual dinámico y accesible, adecuado para las plataformas donde los jóvenes pasan gran parte de su tiempo, como YouTube, TikTok e Instagram.
El medio ofrece una variedad de programas, desde entrevistas en profundidad hasta debates cara a cara, en los que dos personas con puntos de vista opuestos discuten un tema de actualidad.
También cuenta con investigaciones en las que se exploran cuestiones sociales desde distintas perspectivas, siempre buscando involucrar a los actores principales y ofrecer contenido que fomente la curiosidad y el espíritu crítico.
Uno de los aspectos clave que distingue a Le Crayon es su capacidad para atraer audiencias masivas. Con más de 40 millones de visualizaciones mensuales y 6,5 millones de espectadores únicos, se ha posicionado como una plataforma influyente en la que los jóvenes pueden no solo consumir contenido, sino también participar en discusiones que van más allá de los titulares simplistas y los mensajes rápidos que dominan gran parte de la información digital.
Según datos publicados por la propia plataforma, cuenta con 214.000 suscriptores en YouTube, 91.000 seguidores en Instagram y una presencia notable en TikTok, Facebook y otras redes.
@lecrayonmediaDoit-on interdire la corrida en France ? L’avis de Delphine Wespiser, chroniqueuse et animatrice de télévision, engagée dans la défense de la cause animale. Face à elle, Rafi Raucoule, matador de toros.♬ son original – Le Crayon ✏️
Además de su éxito en la creación de contenido de debate, Le Crayon también ha trabajado en colaboración con empresas e instituciones para ayudarles a comunicar sus temas de interés a una audiencia más joven, entre ellas, el propio Ministerio de Justicia francés.
El podcast Ça bouge dans les médias resaltó también otros medios como Entre les lignes, que se dedica a combatir la desinformación con un enfoque explicativo y narrativo, y Backseat, un programa de Twitch liderado por Jean Massiet que analiza la actualidad política.
Sin embargo, es Le Crayon el que ha destacado por su enfoque innovador en un momento en el que la capacidad de conectar con las audiencias jóvenes parece ser el reto más grande para los medios tradicionales.