En noviembre del año pasado, los periodistas argentinos Abel Escudero Zadrayec y Mauro Decker Díaz lanzaron 8000, un newsletter para bahienses hecho por bahienses con información diaria relevante y contextualizada.
El nombre elegido para el boletín ya denota la impronta local que buscan darle a este nuevo producto periodístico nacido durante la pandemia: 8000 es el código postal de Bahía Blanca, municipio de al menos 300.000 habitantes, según el último censo, ubicado al sudoeste de la provincia de Buenos Aires.
El valor diferencial de este newsletter, un formato en auge y clave para muchos medios que apuestan por la fidelización de la audiencia y de la monetización de sus contenidos digitales, es que “surgió para servir a Bahía Blanca”, como explica su fundador, Escudero Zadrayec.
La función de este boletín es ofrecerles a los vecinos “un panorama completo” de las noticias de la ciudad que les llega cada día al correo electrónico, temprano, para arrancar el día informado, en 5 minutos y gratis. Y, a través de este servicio, establecer con ellos una relación.
Curaduría de información y trabajo original
La propuesta editorial combina curaduría de información que surge de medios, sobre todo locales, de redes sociales y trabajo original. Todo eso va acompañado de un estilo narrativo “descontracturado” y “cómplice”, pero siempre respetuoso. Es acaso otra forma de conectar con la comunidad suscripta al newsletter, que en cada entrega encontrará algún guiño a la pertenencia e identidad bahiense.
Además de dirigir 8000, Escudero Zadrayec es colaborador en el Washington Post y coautor, con Eduardo Suárez, del boletín semanal en español, y consultor en el Instituto Reuters de la Universidad de Oxford. Antes trabajó como jefe de Calidad Digital en Clarín y fue editor jefe digital en La Nueva, el periódico de Bahía Blanca. Junto con Decker Díaz, que además es capacitador en innovación y visualización, son miembros del Foro de Periodismo Argentino (FOPEA).
En esta entrevista para el Laboratorio de Periodismo, el periodista argentino cuenta, con el mismo estilo que tratan de darle al producto; cómo nació el proyecto; cuáles son los planes para hacerlo crecer; cuántos suscriptores lograron convertir en estos tres meses de trabajo; y por qué es importante escuchar a la audiencia y entregarle un servicio útil, de calidad, serio, ético, independiente, transparente e inclusivo.
Un recorrido por la edición del miércoles 27 de enero del newsletter 8000
(P) ¿Cuál es el escenario de medios digitales en Bahía Blanca?
(R) La oferta es amplia en cantidad. El problema del menú es la falta de variedad y su calidad, sobre todo en términos de un valor básico, esencial del periodismo: el control del poder, que prácticamente no existe. El gobierno local derrama una generosa pauta y tiende a marcar la agenda pública, sin incomodidades relevantes. Entonces queda un temario reducido y efectista, con gacetillas oficiales, sucesos policiales con tono uniformado, exceso de dedito levantado y escasez de datos confiables. Hay una multitud de voces sin ser escuchadas, el debate público es una entelequia y encima existe una concentración mediática en un grupo al que le importan los negocios infinitamente más que el periodismo. Eso es lo central de un asunto complejo, que (con matices) se repite en demasiados lugares.
(P) ¿En base a qué diagnósticos planificaron el surgimiento de 8000?
(R) El proyecto precisamente surge en respuesta a ese contexto: vimos que a nuestra ciudad le faltaba una propuesta de periodismo 100% profesional, independiente, serio, ético, transparente e inclusivo, que exprese diversidades y salga de los contornos cómodos, que tenga a la comunidad en el centro de su operación: que escuche a la gente y la atienda. Que cumpla cabalmente con su deber cívico en una democracia. El newsletter es nuestro pasito inicial para empezar a cubrir ese hueco dantesco y peligroso para cualquier sociedad.
(P) ¿Tomaron de referencia algún newsletter que apunte a una cobertura local y centrada en la audiencia del lugar?
(R) En cuanto a la inspiración, seguro hay toques de The Morning [el boletín matutino de The New York Times], de Axios, de Capital Daily… Pero lo fuimos tallando con un procedimiento que inauguramos hace varios años ya, llamado #beerstorming, que consiste en juntarnos a tomar cerveza y plantear ideas, intercambiar y debatir y gritarnos y pulir y definir acciones y ejecutar y parir más ideas.
(P) Por haber trabajado en redacciones de medios multiplataforma de Argentina de distinta escala y alcance, ambos tienen conocimientos sobre audiencias, innovación y nuevas narrativas. También están al tanto de las tendencias en el sector. ¿Qué aporta cada uno de ustedes en este proyecto periodístico?
(R) Registré la marca 8000 hace varios años porque me atraía la posibilidad de armar una propuesta periodística para mi ciudad. Un poco por mi trabajo en el Reuters Institute y mucho por curiosidad e interés profesionales sigo el fenómeno del periodismo local y su ausencia, los desiertos informativos y las propuestas innovadoras para atender comunidades secas de periodismo. De esa exploración es hijo este proyecto. Convoqué a Mauro, con quien ya había trabajado, y se arriman otros colegas y amigos para dar una mano, porque comparten principios y formas de ejercer la profesión. Y entre todos le vamos dando forma a 8000. Yo apenas vendría a ser el director de cierto caos minucioso.
(P) ¿Cuál es la estrategia para captar suscriptores?
(R) El producto, 100%. Hasta ahora no hemos hecho promoción, ni marketing, ni nada que se le parezca. Y esta es la primera vez que hablamos públicamente de 8000. Preferimos que 8000 hable por sí mismo y haga su ruido siendo útil, ameno y gratuito.
(P) ¿A qué audiencia apuntan?
(R) A toda aquella persona a la que le interese la extraordinaria ciudad de Bahía Blanca, Capital del Universo [NdR: Bromea y exagera al referirse a su ciudad natal].
(P) ¿El tono y el estilo del newsletter busca entablar una relación de cercanía con el suscriptor?
(R) La intención primigenia es hacer algo que nos guste consumir. Proponemos un estilo narrativo descontracturado y acaso “cómplice”, pero regateando la estupidez y el cancherismo, siempre con respeto, cuidado y cariño por nuestros vecinos. Porque somos bahienses y nos importa Bahía. Y en el proceso hay algunos guiños, como montarnos en esa bahiensidad, a veces incluso hiperbólicamente o con ironía. O al usar la etiqueta #OrgulloBahiense: ahí entran personajes obvios y exclusivos como nuestro Premio Nobel César Milstein, Abel Pintos o Manu Ginóbili, pero también una chica que se va a España para jugar al básquetbol o una escritora que publica un cuento. Nada de lo bahiense me es ajeno [NdR: Hace alusión a una de las frases célebres de Terencio].
(P) ¿Cuántos suscriptores tiene actualmente 8000?
(R) Ya superamos los 17.000 y estamos dialogando con la plataforma Substack para ampliar la base de datos. Y todos los días se suma gente, aunque nacimos en pandemia y crecemos en esta época dura, económicamente y hasta estacional: acá es verano y todos los ritmos se desaceleran.
(P) ¿Cuán importante son las métricas cualitativas y las cuantitativas para entender más sobre la audiencia del newsletter?
(R) Las métricas vinieron a arruinar el negocito de quienes se creían chamanes que interpretaban a la audiencia desde sus intestinos. ¡Enhorabuena! De ninguna manera desdeñamos la intuición periodística ni el conocimiento empírico, pero no nos encadenamos a ello: craneamos una idea y se discute, se pule, se somete a prueba, se mide, se evalúa, se corrige, se itera y así. La única obsesión es mejorar, siempre.
(P) En cuanto a la cobertura, ¿cómo definen los temas?
(R) El boletín es básicamente una curaduría de información que surge de medios (sobre todo los bahienses, pero también foráneos), redes sociales, trabajo original y demás fuentes. Y le inoculamos cierto estilo narrativo.
(P) ¿Cómo se financia o sustenta el proyecto?
(R) Por ahora, casi todo sale de nuestros bolsillos. Sólo nos manejamos con un sistema de donaciones vía cafecitos: si te gusta lo que hacemos y tenés ganas, nos invitás un café mediante una aplicación. Y también podés aportar vía PayPal. No queremos ser invasivos ni molestos. De movida decidimos no aceptar dinero de arcas públicas ni de impresentables. Hay empresas interesadas en auspiciarnos y vamos a analizar cada caso, sin apuros. Recién vamos 3 meses de trabajo. Y apostamos porque creemos en el producto y en nuestros planes para hacerlo crecer.
(P) ¿Qué canales utilizan para difundir el newsletter?
(R) Hasta ahora, como decía, es solamente el boca a boca que ocasiona el producto. En la siguiente fase ejecutaremos nuestra estrategia para redes sociales, mensajería y demás. Y queremos hacernos fuertes en lo que llamo “atención al cliente periodístico”: escuchar a la audiencia, establecer una relación, construir juntos.
(P) ¿Qué objetivos a corto y a mediano-largo plazo tiene el proyecto desde el punto de vista editorial y de su financiamiento y proyección de conversiones?
(R) La meta básica en esta primera etapa es ocupar nuestro lugar en el menú informativo bahiense con una marca potente y una propuesta distintiva. Y después, expandir nuestro código mediante otras iniciativas periodísticas.
(P) ¿Cuál es el valor diferencial de 8000 para los habitantes de Bahía Blanca? ¿Creen que este proyecto podría replicarse en otras localidades del municipio de Bahía Blanca e incluso en otros municipios de la provincia de Buenos Aires?
(R) 8000 surgió para servir a Bahía Blanca. Y el boletín se destaca por ofrecer un panorama completo y ojalá interesante que llega cada día al correo electrónico, temprano, para arrancar el día informado, en pocos minutos y gratis. Y en nuestro #beerstorming hemos recibido la visita de la ambición, así que estamos registrando nuestro camino minuciosamente porque vamos a compartir los aprendizajes con colegas de cualquier parte: pretendemos que 8000 se transforme en un modelo periodístico adaptable a otros escenarios locales.