La prensa regional tiene una penetración tan relevante en sus respectivos territorios, que la hacen, en la mayor parte de los casos, no sólo líder, sino el medio en el que realmente los ciudadanos se informan con más detenimiento, porque es el que más habla de los problemas de su entorno inmediato.
Sin embargo, esa territorialidad hace que, en un momento en que el alcance y el volumen es relevante, los medios locales tengan más dificultades para poner en marcha proyectos que generalmente sólo ejecutan medios nacionales.
Pero la prensa regional francesa acaba de dar un ejemplo de que, en estos momentos, es más necesaria que nunca la colaboración y las alianzas. En una iniciativa que supone, en palabras de medios franceses como Les Echos, «una pequeña revolución», seis editores de prensa regionales (Centre France, Ebra, Rossel, Sipa-Ouest-France, Sud Ouest y La Dépêche du Midi) se han unido para lanzar un nuevo medio de información dedicado al entretenimiento, así como a la televisión y las nuevas pantallas, tanto en papel como en digital.
«Diverto«, como se llamará la nueva revista, será distribuida por 53 medios asociados («Ouest-France», «La Voix du Nord», «L’Alsace», «Le Télégramme», “La Provence”, “Nice-Matin”, “Le Dauphiné”, etc.), y su lanzamiento está previsto para principios de 2023.
Este medio, que pretende ser “digital first”, se distribuirá como un suplemento en los diarios de los fines de semana. Este tipo de productos son habituales en grupos de comunicación regional que poseen varios medios, y una revista elaborada en el propio grupo se distribuye en todos sus medios regionales, pero es infrecuente que se asocien seis editores distintos para acordar lanzar una revista conjunta.
Además, los periódicos regionales que ahora encartaban el suplemento de Le Figaro, dejarán de distribuirlo y será sustituido por esta nueva revista.
Se trata de una apuesta ambiciosa. Los impulsores del proyecto pretenden alcanzar una distribución de pago de 3,2 millones de ejemplares desde el primer número. Los editores esperan una audiencia de 10 millones de personas semanalmente. En digital, esperan 2 millones de visitantes únicos mensuales en promedio, el primer año, con un crecimiento del 50% anual durante los primeros tres años.
Los costes (contratación de una treintena de personas, incluido un tercio de periodistas, campaña de comunicación, etc.), se repartirán entre los diferentes grupos editoriales en proporción a la circulación, explica Les Echos.
Del mismo modo, los ingresos publicitarios se repartirán entre los distintos editores.
«Diverto» pretende ingresar alrededor de 20 millones de euros en publicidad en el primer año, un 10% en digital, que luego se prevé que aumente.