Fernando de Yarza, presidente de la Asociación Mundial de Periódicos y Editores de Noticias (WAN-IFRA) y de Henneo, ha realizado un viaje a Ucrania, en un gesto de apoyo y compromiso con los periodistas que trabajan en zonas de conflicto. El viaje se lleva a cabo pocos días antes de que De Yarza ceda su presidencia en el organismo internacional, que se celebra esta semana en Copenhague.
Acompañado por Bartek Hojka, representante de la Asociación de Periodistas de Polonia; Vincent Peyrègne, CEO de WAN-IFRA; y Miguel Ángel Liso, director editorial de medios de Henneo. De Yarza pasó tres días en Lviv, cerca de la frontera con Polonia. Durante su estancia, se reunió con responsables de las principales asociaciones de periodistas de Ucrania y con directivos de medios de comunicación, quienes viajaron desde diversas zonas del frente para compartir las dificultades que enfrentan en su labor diaria en un contexto de guerra.
Los periodistas ucranianos explicaron los retos que suponen la escasez de papel, los cortes constantes de energía y los problemas de distribución que han llevado a un desplome sin precedentes en las ventas de periódicos. Además, muchos periodistas han abandonado sus trabajos para unirse a la lucha en la guerra. “Lo primero es defender el país, pero también nos esforzamos en combatir con información veraz la propaganda rusa”, afirmaron representantes de asociaciones de periodistas, agradeciendo la visita de De Yarza y su apoyo.
Durante los encuentros, Oksana Brovko, presidenta de una de las principales asociaciones de periodistas, entregó a De Yarza un frasco de cristal con una bandera de Ucrania en su interior, simbolizando los valores democráticos por los que luchan y mueren. “Cuando alcancemos la victoria, podrás abrirlo, sacar la bandera y celebrarlo con nosotros”, expresó Brovko. “Hacéis un gran trabajo en unas circunstancias terribles, nunca os dejaremos”, indicó De Yarza
Además de los encuentros con periodistas, De Yarza visitó un hospital de rehabilitación militar y participó en una ofrenda en honor a los periodistas fallecidos, recordando a más de 600 soldados enterrados en el lugar.