Cientos de medios de comunicación de Estados Unidos han iniciado esta semana una campaña publicitaria conjunta para pedir al Gobierno federal que obligue a las grandes empresas tecnológicas a pagar por el uso de contenidos protegidos con derechos de autor. Bajo el lema Support Responsible AI (Apoyar una inteligencia artificial responsable), el mensaje principal es directo: “Detengan el robo de la IA”.
La campaña está impulsada por la asociación sectorial News/Media Alliance y aparece tanto en versión impresa como digital. Los anuncios muestran frases como “La IA te roba a ti también” o “Robar es antiestadounidense”, e instan a los ciudadanos a reclamar a sus representantes políticos una regulación que garantice una compensación justa a los creadores de contenido –ya sean periodistas, escritores o artistas– y que exija la atribución de autoría en los contenidos generados por sistemas de IA.
La reclamación llega pocas semanas después de que OpenAI y Google remitieran cartas a las autoridades de EE UU solicitando que se permita a sus modelos de inteligencia artificial entrenar con contenidos con derechos. En respuesta, los editores reclaman un marco equilibrado. “Las grandes tecnológicas y las empresas de IA están utilizando el contenido de los editores en su contra, tomándolo sin autorización ni compensación para alimentar productos que desvían ingresos publicitarios y de suscripción de los creadores originales”, ha declarado Danielle Coffey, presidenta de News/Media Alliance, en un comunicado. “La industria de los medios no está en contra de la IA. Muchos editores la emplean. Pero pedimos un ecosistema equilibrado, donde se construya de manera responsable”.
Entre los participantes se encuentran The New York Times, The Washington Post, The Guardian, The Atlantic, Politico (propiedad de Axel Springer), Wired (del grupo Condé Nast), Seattle Times o Tampa Bay Times, o Vox Media, editora de The Verge, donde se recoge esta información.
La iniciativa recuerda a otra lanzada en febrero por cabeceras del Reino Unido, que publicaron en sus portadas el mensaje “MAKE IT FAIR”, también como llamamiento a frenar el entrenamiento de IA con contenido protegido. Como en aquella ocasión, la campaña en EE UU incluye enlaces y códigos QR que dirigen a una página web desde la que los usuarios pueden enviar sus demandas a sus representantes políticos.