Él busca, filtra, selecciona, organiza y aporta una mirada agregando valor. Luego comparte. Antes tuvo que haber identificado las necesidades de la audiencia, de su audiencia, ese nicho específico que está suscrito al newsletter porque sabe con qué se va a encontrar. El ABC de la tarea de un curador de contenido se resume en esas 4´s que Javier Guallar investiga y pone en práctica desde hace más de una década: search (búsqueda), select (selección), sense making (caracterización) y share (difusión).

Doctor en Comunicación, profesor e investigador en Información y Documentación por la Universidad de Barcelona, Guallar cuenta con más de 200 artículos publicados y lleva adelante, desde 2021, la newsletter semanal Content curators.

 

(P) ¿Qué es lo que te inspiró a producir un newsletter de metacuración y qué te sigue entusiasmando casi 140 ediciones después para seguir haciéndolo?

Guallar: Es una confluencia de factores. En la parte de profesional, el primer acercamiento al formato newsletter es como investigador, porque llevo especializándome desde el 2013 en curación de contenidos, y desde hace unos años la newsletter emerge como el producto más apropiado para hacer curación, diría que es el formato estrella de la curación de contenidos en este momento

Además, también trabajo a nivel independiente, entonces me interesa no solamente investigar los formatos sino practicarlos. Probé la newsletter como pruebo el perfil de Twitter, o el perfil de Instagram. Y como soy profesor en asignaturas que tienen que ver con medios sociales, antes de decirle a mis estudiantes con qué deben trabajar, yo tengo que saber bien cómo funciona y probarlo. Así que la motivación viene de la investigación, desde la práctica y como profesor. 

(P) Durante estos años en que se desarrolló el formato ha ido cambiando su redacción y su estructura; los medios tienden al newsletter de autor o a incorporar la mirada del periodista y no la selección automatizada de artículos ¿Por qué crees que se ha producido este viraje?

Guallar: Creo que la newsletter personal y profesional tiene un montón de ventajas para el medio. En la primera etapa eran newsletters enfocadas a campañas de ventas y al contexto informativo de los medios de comunicación, una selección automatizada de los titulares del día. La newsletter actual es creativa, de autor y de curación y los medios lo ven como esa oportunidad para conectar de una manera más personal y directa con su audiencia.

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Hay una relación del propio formato del correo electrónico que tiene características de intimidad, de personalización, que hace que cualquier lector tenga una relación especial con la newsletter. Es muy diferente entrar en cualquier diario digital con un montón de pestañas y opciones, a que te suscribas a una newsletter y ya sabes perfectamente lo que te vas a encontrar: un contenido finito con un principio y un final. Entonces, en el contexto actual de tanta cantidad de contenidos, cubre las necesidades de un formato que enganche, porque es diferente a todo lo demás. 

(P) ¿Cómo abordas en tus clases la enseñanza de la curación de contenido? No suele ser un tema que las nuevas generaciones valoren especialmente, en contraposición con quienes consumen medios desde hace más tiempo.

Guallar: Hay una cuestión muy interesante que tiene que ver con lo generacional. Para los que tenemos cierta edad, la curación es más fácil de integrar pero la Generación Z lo ve diferente. Estos alumnos están muy acostumbrados a las redes visuales donde no hay enlaces, donde no se accede de un contenido a otro sino que se pone una imagen o se publica sin citar la fuente. Entonces aquí hay un sesgo porque consumen contenido muy rápidamente: del carrusel de Instagram a reels o tiktoks. Y, en general, a las plataformas no les gusta la curación porque lo que quieren es que el público esté dentro de esa red social, que no salga de allí, y un link a otro sitio significa salir. 

Entonces diría que la curación de contenido es un reto en la enseñanza de las generaciones más recientes que han crecido ya con Instagram, y ahora todavía más con TikTok, y que están acostumbradas a este tipo de contenido muy visual pero consumen poca información de medios de comunicación, entonces les cuesta más pillar la curación. El caso contrario es el de una persona que consume contenidos de medios y páginas web. Ese tipo de perfil está acostumbrado a ver enlaces y a navegar mediante hipervínculos, entonces entienden perfectamente la importancia de la curación.

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Como investigador y profesor de la asignatura Comunicación en la red en las carreras de grado de la Universidad de Barcelona, Javier Guallar es voz experta para describir qué esperan los jóvenes de los medios y de los periodistas: que fomenten una comunicación más personalizada y que apuesten a una comunidad. En ese sentido, los medios generalistas corren con desventaja en relación a los medios personalizados. Así lo explica Guallar:

(P) ¿Cómo ves el futuro de las carreras de Comunicación y de Periodismo en relación a sus planes de estudio y del devenir de los medios? 

Guallar: Las carreras de comunicación tienen que estar más pendientes de los cambios para ir adaptándose, porque sino cuesta que a los estudiantes les sirvan los contenidos que fueron pensados hace 10 años o más. Y, dependiendo de la universidad, se ha ido corrigiendo más o menos este enfoque, porque ahora son muy diversas las empresas o situaciones para las cuales puede trabajar un comunicador o un periodista. Un egresado ahora evalúa ingresar a los grandes medios como una opción más,  no es la más importante ni la más significativa.

Crear un medio propio, explorar nuevas estructuras comunicacionales, o ser comunicador en diferentes empresas, organismos o entidades son posibilidades reales para un periodista hoy. Con ese panorama las universidades tienen que ofrecer contenidos actualizados, mirando qué es lo que está pasando y poniendo en valor el trabajo profesional de los comunicadores actuales. 

(P) ¿Utilizas inteligencia artificial en alguna parte de tu proceso de producción de la newsletter?

Guallar: En mi caso hago consultas a asistentes de IA igual que hago consultas a buscadores. Puede decirse que la IA forma parte de las herramientas de la primera fase de la curación, la búsqueda. También puede ayudar mucho en la última fase, que es la de difusión, a la hora de automatizar determinados envíos. Pero, en la fase que consiste en seleccionar, tiene que prevalecer el criterio profesional del curador porque es una instancia fundamentalmente humana y de aportación de valor. Entonces yo creo que, al final, es una combinación de herramientas con el trabajo intelectual profesional. La intervención humana es una garantía de calidad.

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(P) ¿Cómo analizas la incorporación de su enseñanza en la universidad?

Guallar: Actualmente tenemos el reto de cómo incorporamos los contenidos de IA dentro de la currícula porque, como comunicadores, tenemos que saber cómo adaptar y utilizar las herramientas de IA, pero nunca nos tienen que sustituir en la parte más creativa porque el toque personal es lo más relevante. 

La proporción de intervención humana en cada trabajo dependerá de las circunstancias del producto y de la persona que lo trabaja. Si hablamos de curación de contenido,  en la tercera fase o sense making, considero fundamental que el mayor peso recaiga en el profesional. Esta etapa, que incluye la mirada personal, la selección cuidadosa de palabras y la interpretación con base en años de experiencia, debe estar resguardada para garantizar calidad y autenticidad. 

De X a Bluesky: la migración de los medios también llegó a las universidades

Guallar cuenta que hace unas semanas la Universidad de Barcelona se unió a la decisión de muchas otras instituciones educativas, medios de comunicación y usuarios de redes sociales, de abandonar la red X para migrar a la nueva plataforma Bluesky. En este sentido, explica que aprovechó esta decisión institucional para poner en práctica la comparación de ambas opciones en el aula y observar, junto a sus estudiantes, qué características tiene esta nueva red que ya cuenta con 25 millones de usuarios.

(P) ¿Qué análisis preliminar hicieron de Bluesky tus estudiantes?

Gullar: La percepción de los alumnos es que es una red social pequeña y les cuesta más encontrar perfiles como sí existen en Twitter. Por otra parte, es una plataforma mucho más amigable en relación a la experiencia de usuario.

En X hay muchos contenidos que no te interesan, que no son los que tú has pedido y tienes que hacer un trabajo de curar bastante tu perfil. Digamos que en X la experiencia no es del todo satisfactoria y Bluesky ahora mismo viene a intentar recuperar ese espíritu de Twitter de hace 10 años, puedes personalizar las pestañas de navegación y hacer diferentes tipos de algoritmos para personalizar tu feed, eso da una sensación más agradable.

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