El consumo de televisión cayó un 11% en 2021 con respecto a 2020, según el Anuario de Audiencias de TV de Kantar. En total, fueron 213 minutos diarios en promedio, tres horas y media ante el televisor.
El consumo de televisión durante 2021 fue paralelo al discurrir de la pandemia. Entre enero y abril, con el Estado de Alarma y medidas de restricciones en vigor, los españoles dedicaron de media 4 horas de su tiempo, cifras más propias del confinamiento.
Lo mismo sucedió en diciembre, cuando la irrupción de la variedad Ómicron dejó a más españoles en casa y fue entonces cuando el consumo televisivo volvió a repuntar ligeramente por encima de la media, apunta el estudio.
Asimismo, si esta fotografía de consumo se enfoca en las Comunidades Autónomas, se observa que Castilla-La Mancha, con 236 minutos, es decir, 4 horas de media al día, es donde más “tele” se ve en toda España. Seguidamente, aparece Castilla y León, con una cifra muy similar, 234 minutos.
El fútbol volvió a reinar
En lo que se lleva de siglo, solo tres años tuvieron a un programa no futbolero como el más visto. Uno de ellos fue 2020, debido a que no hubo deporte por la pandemia y fue la Nochevieja la que juntó a más españoles ante el televisor, metidos en casa en unidades de convivencia, sin poder celebrarla fuera.
En cambio, en 2021, el regreso de las competiciones deportivas y la celebración de la Eurocopa con un año de retraso hizo que el fútbol volviera a reinar como la emisión más seguida. En concreto, la prórroga del España-Italia congregó a dos de cada tres espectadores que en ese momento estaban ante el televisor.
Así consumimos la otra “tele”
Otra de las conclusiones del informe de Kantar es la cada vez mayor exposición ante el televisor, pero no para ver propiamente televisión. En concreto, este consumo alternativo se sitúa ya en media hora diaria en promedio, creciendo del 10,8% al 12,4% respecto a la cuota total de televisión.
Además, son los niños de 4 a 12 años los que más usan la “tele” de esta otra forma. Y es que una tercera parte de su consumo fue destinado a otros contenidos no televisivos propiamente dichos.
En cuanto a la televisión en las segundas residencias, el factor edad también es determinante, aunque en este caso la población clave son los mayores de 65 años, que prácticamente duplican el consumo medio en estas viviendas alternativas. Además, por perfilar este tipo de consumo, está muy vinculado como es lógico al tiempo de ocio, de ahí que sea en agosto y sábado cuando más se enciende la “tele” en las segundas residencias.
Menos “tele” ¿más “publi”?
Si en 2020 se dio la aparente paradoja de más consumo de televisión y menos publicidad, en 2021 se vivió la situación opuesta: menos “tele”, más “publi”. De este modo, hubo hasta un 17% más de inserciones publicitarias el año pasado, a pesar de los espectadores dedicasen un 11% menos de su tiempo a ver programas.
Los sectores que más apostaron por la publicidad en TV fueron alimentación con un 18,1% de las inserciones, seguido de distribución y restauración con un 14,1% y belleza e higiene con un 9,6%.
El Anuario de Audiencias de TV de Kantar registra datos de audiencias de un panel de 5.720 hogares en toda España, generado así una fotografía de lo que los espectadores ven en la televisión en sus hogares y en sus segundas residencias, desglosado por cadenas y programas, además de los otros usos que dan a la pequeña pantalla.