“Estamos en la era de la desintermediación. Los periodistas ya no ocupamos la posición de guardianes de la información –gatekeepers– y esa pérdida de la centralidad confundió mucho las cosas.” Así, sin preámbulos, José Luis Rojas Torrijos, profesor e investigador de la Universidad de Sevilla y director del Máster en Periodismo 360 con RTVE Instituto, comparte al inicio de esta entrevista un lúcido análisis de la situación actual de la profesión.
“El reto para quienes nos dedicamos a la docencia en periodismo es enorme: el desfase entre la realidad del periodismo actual y lo que se imparte en las aulas nos exige innovar dentro de nuestras materias y mientras los referentes periodísticos y culturales de nuestros estudiantes son distintos, debemos explicar que las bases siguen siendo las mismas y la ética periodística tiene que estar en primer lugar”, asegura Rojas Torrijos, también docente en el Máster de Innovación en Periodismo de la Universidad Miguel Hernández de Elche.
(P) Las audiencias y los estudiantes confunden la creación de contenidos con el periodismo. ¿Cómo abordar esa diferenciación en las clases?
Rojas Torrijos: Posicionando al periodismo en el lugar que le corresponde y haciendo entender su valor a la sociedad. Hay que definir qué tipo de referentes, fuentes y actores mostramos a nuestros estudiantes porque es clave que ellos comprendan que, aunque coexistimos con los creadores de contenido, el periodismo tiene una misión profesional y un mandato de servicio público que no comparten los demás y es necesario defender el ejercicio profesional desde la diferenciación, subrayando que no cualquiera puede ser periodista.
Sin adoptar una posición negativa en torno a estos nuevos referentes de la comunicación, porque “es comprensible que haya confusión” en la audiencia, Rojas Torrijos propone ampliar la faceta didáctica del periodismo, mostrando al público que nuestra labor y misión son distintas de las de otros creadores de contenido”. Así lo desarrolla:
(P) Sos coautor, junto a Susana Herrera Damas, de dos libros esenciales para la investigación y enseñanza del periodismo en el actual ecosistema, el Manual de nuevos formatos y narrativas en el periodismo y la no ficción y Manual de nuevos perfiles profesionales. ¿Cómo surgió la idea de publicarlos?
Rojas Torrijos: Con Susana creíamos que hacía falta un manual que reuniera lo que hasta ese momento se sabía sobre el concepto de formato y narrativa en el periodismo digital. Nos pareció que la mejor manera de estructurar el libro era incluyendo una vertiente académica, con rigor en la metodología y la recopilación, junto con un enfoque divulgativo que facilitara la transferencia del conocimiento tanto para estudiantes como para colegas. El segundo manual se enfocó en los perfiles profesionales, y decidimos hacerlo a través de entrevistas, convencidos de que quienes protagonizan el cambio son los mismos profesionales. Entendemos que la academia y la profesión deben caminar juntas; esa conexión es inevitable y se alimenta mutuamente.
(P) Cuando en el aula hablamos de innovación dentro del periodismo mostramos ejemplos de medios que incorporan narrativas y formatos para llegar a las audiencias. ¿Cómo convive la enseñanza del periodismo tradicional con la permanente búsqueda de nuevas narrativas?
(P) Rojas Torrijos: Debemos encontrar formas de conectar lo que los estudiantes ya conocen con lo que queremos que comprendan. Por ejemplo, si utilizo una video-crónica para explicarles qué es una crónica, probablemente tenga más éxito que si la explico de manera tradicional.
La clave está en adaptar la forma, usando elementos visuales e infográficos que ellos asimilan mejor, como el snack content o contenido breve al que están acostumbrados en redes sociales. Esto nos permite adaptar los géneros periodísticos tradicionales a su lenguaje y modo de consumo, para facilitarles la comprensión, pero sobre todo, el interés.
Uno de los grandes retos y oportunidades para acercar el periodismo a las generaciones más jóvenes es enseñarles que los nuevos medios y plataformas ofrecen la posibilidad de diversificar los contenidos, brindando acceso a temas y enfoques que resultan difíciles de encontrar en los medios tradicionales. Los podcasts, newsletters, canales de YouTube, tweets y redes sociales en general son una vía eficaz para hacer periodismo y conectar con nuevas audiencias.
Los contenidos snack, más breves y visuales, pueden ser un punto de partida que despierte el interés en algo específico y lleve a los usuarios a profundizar en nuevos temas o descubrir periodistas y marcas periodísticas relevantes.
José Luis Rojas Torrijos, uno de los investigadores más prolíficos en el ámbito del periodismo deportivo, ha publicado numerosos artículos que lo llevaron a desempeñarse como asesor de innovación en Marca durante dos años. En ese medio, referente global del periodismo deportivo, desarrollaron un laboratorio que mostró el potencial de combinar el análisis académico con la creatividad profesional.
La experiencia fue enriquecedora, según cuenta: “La interacción de academia y profesión es una vía poderosa para la innovación. El periodismo deportivo es un campo de constante creatividad y exploración, que prueba y adapta formatos como live blogs, multimedia, periodismo de datos y visualización, gamificación, entre otros. Estos formatos, si funcionan, son luego replicados en otras áreas informativas”.
Y es justamente el periodismo deportivo -donde las estadísticas y los datos cobran especial relevancia- un terreno de vanguardia para explorar los usos de la inteligencia artificial, como desarrolla en uno de sus últimos artículos.
(P) Sabemos de todas las bondades de la inteligencia artificial en relación a la sistematización de procesos, ¿evidencias alguna amenaza en el uso extendido de la IA dentro de la profesión?
Rojas Torrijos: Pienso que aunque el impacto de la tecnología, porque finalmente la IA es una tecnología, depende del uso que se le dé, su potencial para mejorar el periodismo es innegable y debería verse como una oportunidad positiva; si se agilizan ciertas tareas, los periodistas disponen de más tiempo para labores de campo, investigación y reporterismo. Por otro lado, también se modifican las formas de organización del trabajo periodístico, generando nuevos perfiles profesionales, como el de editor de IA.
Este perfil será el encargado de supervisar y optimizar la producción de contenidos generados por inteligencia artificial, como bots y otras soluciones tecnológicas. Lo que también creo es que es fundamental dar a la tecnología un propósito social y aplicarla con el rigor, la metodología y la verificación que exige el trabajo informativo. Su uso ético depende de las personas, no de la tecnología en sí misma.
(P) ¿Por qué crees que existe una percepción generalizada dentro de la profesión y la academia de que el periodismo deportivo es una especialización con menos relevancia o más ligado al entretenimiento?
Rojas Torrijos: Si bien es cierto que el periodismo deportivo está principalmente vinculado al entretenimiento, la opinión y el fútbol masculino, desde la academia hemos trabajado arduamente para mostrar que el periodismo deportivo va mucho más allá de esas temáticas habituales en medios.
El universo del deporte es diverso y complejo, y abarca aspectos de enorme relevancia social, como la industria, la economía y la gobernanza de las instituciones deportivas. Por eso es importante entender que el periodismo deportivo, como cualquier especialización, debe compartir los mismos estándares de rigor, metodología y ética aunque algunos referentes promuevan una idea distorsionada.
También es importante entender que estamos aún en las primeras etapas de desarrollo académico en esta especialidad, en contraste con el ámbito anglosajón, donde el periodismo deportivo tiene un mayor prestigio, por eso desde la universidad debemos liderar la formación de periodistas deportivos que aporten profesionalismo y prestigio a esta especialización.
