[Una selección y comentario de noticias sobre periodismo que me han llamado la atención en los últimos siete días]
Una de las preguntas que más hacen directores, subdirectores y parte de los staffs de medios regionales y locales a los consultores SEO con los que trabajan sigue siendo, como hace años, «¿si yo he publicado la noticia primero y soy la fuente original, por qué los grandes medios, que nos han copiado, salen por delante en Google?». Y la pregunta tiene toda su lógica, si de lo que se trata es de hablar de periodismo y no de algoritmos.
Google anunció hace tiempo que quería poner solución a este problema, y hace unos días concretó su propuesta: colocará una etiqueta especial en las noticias que estén siendo más enlazadas, esperando que sean la fuente original. Que es mucho esperar.
La intención, como siempre, es buena: «Supongamos -dice Google- que un medio de comunicación local publica una historia de investigación sobre problemas en su distrito escolar. La historia es tan relevante que es recogida por muchos otros medios de comunicación. Pero ¿y si el lector no ve al final esa historia original, que tenía un contexto único para los residentes locales? Estamos introduciendo una forma de ayudar a identificar historias que han sido citadas con frecuencia por otros medios, brindándole una manera simple de encontrar la información más útil o relevante para una noticia».
Esta etiqueta «podrá encontrarla en cualquier lugar -explica Google- siempre que otros editores indiquen su relevancia mediante un enlace».
Es decir, de momento, quien publica primero una noticia sigue sin ser, para el algoritmo, razón de peso suficiente para reconocerle su mérito. Y presupone, además, trasladando algo que debe ser responsabilidad suya si realmente tiene voluntad de reducir el sesgo, que los otros medios enlazarán con la fuente original, algo que tampoco sucede en demasía, por desgracia. Ese es otro cantar, aunque en algunos países ya se pusieron manos a la obra.
Otro parche, en definitiva, el de Google, que sigue enmascarando el sesgo del algoritmo contra los periódicos locales o regionales o de nicho. ¿Realmente no tiene Google capacidad técnica para determinar qué web informativa o qué medio ha dado primero una información, y concederle mucho más peso en la ponderación algorítmica? Es verdad que no se trata de una sentencia condicional «if /then», pero también es verdad que estamos hablando de Google.
¿Cómo reaccionan ante la información digital las audiencias que carecen de confianza en la mayoría de los medios?
¿Cómo reaccionan ante la información digital las audiencias que carecen de confianza en la mayoría de los medios ¿Qué elementos tienen en cuenta para evaluar las noticias que encuentran mientras utilizan las redes sociales, las aplicaciones de mensajería o los motores de búsqueda
A esas preguntas responde un estupendo informe de Reuters Institute. Son cinco elementos principales:
- Las ideas preexistentes sobre las noticias en general o los medios en particular (de dónde procede la información)
- La influencia de familiares y amigos (que comparten o apoyan esas noticias)
- El tono y la redacción de los titulares (si se perciben como titulares gancho o no)
- El uso de componentes visuales (que suelen considerar como prueba importante sobre qué puede ser confiable y qué no)
- La presencia de publicidad (si la información parece estar patrocinada o no).
Otros indicadores específicos de cada plataforma también influyen a la hora de determinar en qué confiar, como, por ejemplo, cuestiones de diseño sobre cómo aparece la información (por ejemplo, las etiquetas o el elemento que tiene más protagonismo).
Teniendo en cuenta estos elementos, como recoge el informe, si bien algunos indicadores pueden quedar fuera del alcance de los medios (lo cual hace que la responsabilidad recaiga en las propias plataformas), otros están bajo su control y eso significa que hay margen para mejorar la confianza de esos lectores en los medios de comunicación. Pero para lograrlo, lógicamente, hay que prestar más atención al modo en que los contenidos se exhiben en estos espacios digitales. Avanzar en la recuperación de la confianza de los ciudadanos en los medios sigue siendo una de las grandes asignaturas pendientes.
El resumen ejecutivo, en español, aquí. El informe completo, en inglés, aquí.
Francia: todos los candidatos quieren regular GAFAM
En vísperas de las elecciones presidenciales francesas, los candidatos de los principales partidos han hecho públicas las medidas que tomarán, con respecto a los medios de comunicación y su entorno, en caso de llegar al palacio del Elíseo. Una de las ideas en las que casi todos coinciden es en limitar el poder de Google, Amazon, Facebook, Apple y Microsoft (GAFAM).
Nicolas Dupont-Aignan, Anne Hidalgo, Yannick Jadot, Marine Le Pen, Valérie Pécresse y Eric Zemmour han expresado su deseo de reducir la influencia de estas tecnológicas para garantizar la libre competencia y exigirán también un mejor control y moderación de los contenidos.
En algunos casos, incluso, quieren que esa moderación sea ajena a estas propias plataformas, aunque económicamente a cargo suyo. Todos ellos quieren que estas medidas, además, permitan que surjan empresas nacionales que puedan competir con estas tecnológicas.
Las propuestas vienen de todos los frentes. Yannick Jadot (Europa Ecología-Los Verdes) propone además la organización de un debate europeo que desemboque en un ecosistema digital diversificado y descentralizado, que no concibe el poder actual de estas plataformas, y reclama que se cree una organización para la transparencia y ética de los algoritmos que usan estas cinco empresas.
Otros, como Marine Le Pen (Agrupación Nacional), que incluye también en este grupo a Tiktok, quiere que exista la obligación de abrir el capital de GAFAM a empresas europeas y que se rompan los vínculos entre las empresas matrices y las filiales europeas de GAFAM.
Ambos, Yannick Jadot y Marine Le Pen han llegado incluso a proponer el desmantelamiento de las principales plataformas, para que pueda haber libre competencia y surjan otras empresas francesas y europeas.
Nicolas Dupont-Aignan (Debout la France), por ejemplo, quiere un motor de búsqueda francés y redes sociales de propiedad francesa, mientras que Eric Zemmour (Reconquista) quiere establecer un entorno favorable para las herramientas Web3 nacionales (criptomonedas, blockchain, NFT).
Gane quien gane, (Macron también ha hecho guiños al respecto) parece que las plataformas van a tener que lidiar más pronto que tarde con otra marejadilla con tendencia a marejada.
[Este artículo de opinión forma parte de la newsletter de Laboratorio de Periodismo. Semanalmente, Lluís Cucarella, director editorial del Laboratorio de Periodismo de la Fundación Luca de Tena y CEO de Next Idea Media, comenta en un artículo algunos puntos de actualidad de la semana en el mundo del periodismo. Suscríbete]