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Una investigación de la empresa de ciberseguridad Planet Nine ha identificado una red de miles de perfiles falsos en portugués, conocida como «PortuBots», que difunde desinformación a favor de Rusia y China en redes sociales. Según informó CNN Portugal, la operación está especialmente activa en Bluesky, una plataforma que compite con X, y ya cuenta con al menos 2.158 cuentas fraudulentas creadas en apenas cuatro días.

Los perfiles, que utilizan nombres comunes en portugués como «António» o «Carla», fingen residir en lugares inexistentes generados por inteligencia artificial. La investigación revela que su objetivo es influir en la opinión pública con mensajes contra el apoyo de Estados Unidos a Ucrania y en favor del Partido Comunista Chino.

Coordinación estratégica y vínculos estatales

Los investigadores israelíes Tuvia Gering y Noa Rozman, autores del informe, indicaron que la estructura de la red sugiere una campaña coordinada de desinformación con intereses geopolíticos. «El patrón de publicaciones y los términos utilizados apuntan a actores estatales rusos y chinos como posibles responsables», declaró Gering a CNN Portugal.

Uno de los casos analizados es la difusión de una noticia falsa atribuida a Al Jazeera que afirmaba que el Pentágono había criticado a Ucrania por un intercambio de prisioneros con Rusia en diciembre de 2024. En este caso, al menos 52 cuentas de la red «PortuBots» replicaron la desinformación de manera simultánea.

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Además de cuestiones vinculadas a la guerra en Ucrania, la operación ha abordado temas políticos en Europa. Según los investigadores, algunas de estas cuentas han compartido publicaciones sobre el aborto en Noruega o la crisis política en Francia, utilizando información real para generar debates polarizados y dividir la opinión pública.

IA y redes sociales como herramientas de amplificación

La red de desinformación también emplea expresiones y estructuras lingüísticas propias de la propaganda rusa, pero en portugués. Entre ellas, destaca el uso del término «batalhões nacionalistas» para referirse a ciertas unidades militares ucranianas, un concepto recurrente en medios estatales rusos que busca justificar la invasión.

Más allá de la difusión de contenidos políticos, algunas cuentas vinculadas a «PortuBots» han estado activas en sectores aparentemente ajenos a la geopolítica, como las criptomonedas. En diciembre de 2024, 57 perfiles comenzaron a compartir contenido financiero para ganar visibilidad y atraer seguidores antes de ser utilizadas en campañas de influencia.

Bluesky, la plataforma donde se ha detectado la actividad anómala, reportó en septiembre de 2024 un incremento inusual de registros desde Brasil, con más de 15.000 casos sospechosos. Este comportamiento ha sido señalado como un indicador de actividad inorgánica y coordinada.

Un fenómeno en expansión

Las redes de desinformación ligadas a Moscú y Pekín han sido objeto de varias investigaciones recientes. En 2022, la Unión Europea desmanteló la operación «Doppelganger», que utilizaba falsos sitios web de medios occidentales para socavar el apoyo a Ucrania. Más recientemente, el grupo de periodismo de investigación Bellingcat reveló la «Operación Matrioska», que empleaba vídeos generados por inteligencia artificial para amplificar mensajes prorrusos.

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Según Rami Ben Efraim, CEO de Planet Nine, la combinación de inteligencia artificial y redes sociales está llevando la desinformación a «una escala completamente diferente». En declaraciones a CNN Portugal, advirtió que estos fenómenos suponen «uno de los diez mayores riesgos globales» y que sin una respuesta coordinada, las democracias occidentales podrían verse seriamente amenazadas por campañas de manipulación en procesos electorales y decisiones políticas.

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