Las noticias falsas -o fake news– abundan y las nuevas plataformas, como las redes sociales o las aplicaciones de mensajería, aumentan su circulación. Esta amenaza constante al acceso de información calificada, que se agudizó a raíz de la pandemia, es una gran oportunidad para los periodistas y los medios de comunicación para demostrar que el periodismo de calidad es muy necesario.
En este escenario, no todos los medios cuentan con estructuras y políticas para lidiar contra la desinformación. El estudio “Periodismo y desinformación. Cómo afectan las noticias falsas la labor de los periodistas en Argentina”, realizado por el Foro de Periodismo Argentino (FOPEA) y fundación Thomson Media, registró que “4 de cada 10 periodistas expresaron no tener políticas claras de verificación de información en el medio donde trabajan y muy pocos (un 17 %) cuentan con una unidad específica para este fin”.
Además, el trabajo determinó que “la mayoría carece de formación académica específica, y es escasa la capacitación ofrecida por los medios en este tema”. De hecho, el 83 % de los encuestados reclamó “más capacitación sobre herramientas para verificar la información”.
Un proyecto a largo plazo sobre la desinformación en la Argentina
El relevamiento fue hecho en el marco de 100 por Cierto, un proyecto desarrollado por FOPEA y Thomson Media, una fundación internacional que trabaja en pos de lograr un cambio positivo y profesionalismo en los medios y las comunicaciones. El trabajo fue cofinanciado por la Unión Europea. Se trata de “un plan a largo plazo que releva el fenómeno de la desinformación en la Argentina y construye herramientas para enfrentarlo”, tal como explican desde el sitio de la iniciativa.
Para el primer año de desarrollo, 100 Por Ciento tiene como objetivo centrarse en el relevamiento, la investigación y la divulgación de la desinformación en los medios. Para eso, trabaja con todos los integrantes del ecosistema digital: periodistas, medios de comunicación y plataformas digitales; escuelas y universidades; y el Estado y los ciudadanos.
Falta de capacitación, exigencia de tener la primicia y falta de tiempo para verificar, principales factores
En total, en esta investigación encuestaron a 4.130 periodistas que trabajan en medios de la Argentina “para conocer cómo afecta la desinformación su tarea diaria y con qué herramientas cuentan para hacerle frente”, según explican en este resumen ejecutivo que destaca los puntos más resonantes de los resultados.
A la falta de capacitación se suman otros factores que atentan contra la verificación de la información, lo que puede provocar que se publiquen contenidos con datos falsos o tergiversados. Esos factores son, principalmente, la exigencia de tener la primicia (55 %) y, en segundo lugar, la falta de tiempo para verificar la información (16 %).
Estrategias que aplican los periodistas para verificar la información
“Los periodistas perciben las noticias falsas como un grave problema para el periodismo, pero a la vez, éstas impulsan una puesta en valor de la profesión, convirtiendo al periodismo en la herramienta más importante para combatirlas”, destacó el estudio.
En ese sentido, del relevamiento se desprende que el “80% admite verificar mejor la información que recibe antes de publicarla, al ser consciente de la existencia de estas prácticas”.
A la vez, los periodistas utilizan en promedio 5 herramientas para chequear la información antes de publicarla. Entre las estrategias que ponen en práctica, la principal manera es consultar a más de una fuente (97 %), seguida de buscar documentación oficial (84 %), ver qué publicaron otros medios (77 %), usar Google u otros motores de búsqueda (74 %) y preguntar a colegas (72 %). En tanto, un 42 % recurre a Chequeado u otros sitios dedicados al fact-checking.
Mientras que para cubrir una noticia, usan en promedio 4,4 fuentes. “Casi todos, consultan contactos personales (96 %) y documentación oficial (94 %). Para elegirlas, se basan en la reputación y en la confianza, tratando de abarcar, con esas fuentes, varios puntos de vista”, especifica el informe.
La importancia de contar con un “Código de Ética” en las redacciones
Otro aspecto que clarificó el informe es que la mitad de los encuestados aseguró que el medio en donde trabaja no tiene un Código de Ética y si lo tiene, no lo conoce. “Un Código de Ética es el conjunto de normas y principios que se establecen como línea de comportamiento en un medio de comunicación, y que define su compromiso de responsabilidad hacia la sociedad en general”, explican desde 100 Por Cierto.
Consultados sobre el valor de estos documentos, 8 de cada 10 piensa que es importante tener uno para mejorar la práctica periodística y luchar contra la desinformación.
“Hoy los medios de comunicación tienen la posibilidad de ocupar un rol clave en la lucha contra la desinformación. Para ello es necesario fortalecer el rol de los periodistas como garantes de la información contrastada, cierta y contextualizada. El periodismo de calidad es la única fuerza fundamental para exponer a la desinformación”, enfatizan desde las organizaciones al frente de la iniciativa.
