
El Wall Street Journal ha procedido a una reestructuración de su oficina en Washington, que se ha concretado en el despido de aproximadamente 20 empleados. La medida, que se enmarca dentro de una revisión más amplia de la estrategia editorial del periódico, se centra en la eliminación de su equipo de reporteros económicos en Washington, quienes serán integrados al equipo de negocios basado en Nueva York. Asimismo, el equipo dedicado a la cobertura de noticias sobre EE.UU. y China cesará sus operaciones.
Emma Tucker, editora jefe del diario, comunicó mediante un correo electrónico a la plantilla que la oficina de Washington concentrará sus esfuerzos en «política, política, defensa, derecho, inteligencia y seguridad nacional», permitiendo a los empleados afectados por los despidos postularse a algunas de las nuevas vacantes creadas para sustituir la cobertura eliminada. «Es imperativo que tengamos la estructura adecuada en Washington para entregar reportajes confiables y ambiciosos para nuestros lectores en un año electoral y más allá», destacó Tucker en su mensaje.
Esta decisión se produce en un momento de transición para el Journal, después de la llegada de Tucker al puesto principal en 2022, quien inició una revisión del contenido que eventualmente llevó a cambios significativos en la redacción, incluido el traslado del entonces jefe de la oficina de Washington, Paul Beckett, a un nuevo rol.
Los despidos en el Wall Street Journal añaden presión a una industria del periodismo ya castigada por un inicio de año difícil, con el cierre abrupto del sitio de noticias The Messenger y despidos significativos en Los Angeles Times y Business Insider, en medio de un mercado publicitario deprimido y cambios en los hábitos de consumo de medios.