Parte del correo enviado ayer por La Vanguardia

Los periodistas, sobre todo aquellos que gozan de mayor popularidad, son una parte fundamental en las relaciones de lealtad que los lectores establecen con los medios. Las columnas o los reportajes de los periodistas estrella o de aquellos que han logrado atraer más lectores en torno a su nombre, son buscadas a diario como punto de entrada al medio de comunicación o como referencia destacada.

Sin embargo, ha habido siempre cierta discusión sobre si los periodistas deben ser parte activa o no de las campañas de suscripción de los medios, que generalmente se presentan de manera global, poniendo en valor la calidad del periodismo y sus firmas, pero sin que los periodistas sean parte activa de esas campañas, salvo en el caso de los directores, que sí suelen hacerlo, como representantes corporativos. La aparición de periodistas en campañas de marketing se centra más en su trabajo del día a día en temas como la investigación, pero generalmente no como una carta directa al usuario.

Sin embargo, algunos medios sí han dado ese paso en el ámbito internacional. En el caso de España, La Vanguardia, está animando a los lectores que tiene registrados, pero no son suscriptores, a dar el paso y suscribirse, con una llamada a la acción bajo una carta de periodistas de renombre.

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Lo hace, por ejemplo, con periodistas de su redacción como Enric Juliana. Ayer mismo se puso en marcha un envío de correos de Enric Juliana a lectores o suscriptores no de pago. En el correo, el reconocido periodista de La Vanguardia destaca la relevancia que tiene una redacción importante en lo que es la calidad que ofrece un medio:

“El trabajo periodístico -indica Juliana- tiene una notable dimensión individual, pero detrás de cada firma, detrás de cada informe, reportaje, análisis o columna de opinión, hay una redacción. La redacción es imprescindible para hacer un buen periódico. Sin una potente redacción detrás, un medio de comunicación es un mero listado de artículos”.

En la carta, Juliana insiste en que “una redacción es un laboratorio para la compresión del mundo: de lo particular a lo general, de las elecciones norteamericanas al barrio del Cabanyal de València, de las últimas decisiones estratégicas chinas a la experimentación de las últimas vacunas en un hospital de Barcelona o Madrid. La Redacción es un engranaje creativo insustituible. No hay buen periodismo sin una sólida redacción detrás”.

Bajo el texto de Juliana se muestra un botón con una llamada a la acción “Suscríbete”, y el teléfono de Atención al Cliente.

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